Los Matijuegos forman parte de EMAT y permiten divertirse a la vez que practican y adquieren conceptos y contenidos matemáticos. A continuación, te explicamos cuando aparecen y te proponemos algunos consejos para su puesta en práctica.
Los Matijuegos son juegos de mesa que ofrecen la oportunidad de practicar las habilidades matemáticas y de afianzar los aprendizajes adquiridos.
Cada juego se basa en el uso de unas habilidades específicas, pero la suerte también juega un papel importante, así que no siempre ganan los mismos alumnos. Con los Matijuegos se aprovecha mucho más el tiempo y el esfuerzo, permitiendo que cada uno participe de manera activa y sin miedo al error.
Las normas de los juegos están explicadas en el mismo tablero, pero sería recomendable que los alumnos vieran una demostración de cómo se juega. Algunos Matijuegos ofrecen una versión fácil y otra con mayor dificultad.
A continuación, se ofrecen algunos consejos o pasos que pueden ayudar a organizar las sesiones de juego para optimizar mejor los recursos:
- Poner énfasis en divertirse y aprender, y no en la competición. Hacer hincapié en el juego limpio, en respetar los turnos y en la deportividad.
- Cambiar los grupos de juego. De esta manera, los alumnos aprenden distintos conceptos si juegan con personas diferentes. De vez en cuando, podemos colocar los grupos por niveles similares o mezclar los niveles de habilidad.
- Asignar un árbitro dentro de cada grupo: este se asegura de que se siguen las normas, recuerda a los jugadores cuándo es su turno, sigue la puntuación y, en según qué juego, actúa de banquero. Los árbitros son especialmente útiles en las aulas de Infantil.
- Animar a los alumnos a jugar durante su tiempo libre, tanto en el colegio como en casa. Debemos facilitarles el acceso a los juegos. Quizás se podría crear un rincón matemático o un préstamo de Matijuegos.
¿Qué matijuegos se utilizan en 4 y 5 años?
