¿Por qué en Ludiletras se utilizan diferentes tipologías de letras en el desarrollo de la lectura en infantil?

Te explicamos qué dice la ciencia sobre la relación entre tipología de letra y aprendizaje de la lectura.

Desde la perspectiva sintético-fonética, el aprendizaje de la lectura y la escritura se realiza letra por letra, empezando por las vocales y continuando con las consonantes. En Ludiletras, los niños aprenden las vocales a los 3 años y poco a poco van conociendo todo el abecedario completo. Para conseguir este aprendizaje de inicio de la lectura, a lo largo del programa y de forma estratégica y secuenciada, se expone a los alumnos a diferentes tipologías de letras.

Pero, ¿la tipología de letra condiciona la lectura?. La respuesta es no. Según Dehaene y Cohen (2007) el cerebro lector tiene un área que trabaja sobre la forma visual de las palabras, lo que los autores denominan la caja de letras de nuestro cerebro (Dehane, 2015). En palabras del autor del libro el Cerebro lector. De las ciencias cognitivas al aula (Dehaene, 2015): 

“Esta caja nos permite decodificar más allá del tamaño en el que las palabras estén escritas, su posición, la fuente que se utilice, el uso de MAYÚSCULA o minúscula, e incluso aunque las letras no etsén esitcras en el orden crroecto.”

Así pues, el cerebro está diseñado para identificar diferentes las letras, independientemente de cómo estén escritas. Y, de hecho, es un aspecto muy importante puesto que la realidad es que los alumnos, desde bien pequeños, están expuestos en su día a día a una gran diversidad de palabras y textos escritos, característica que debemos integrar en nuestra enseñanza.

Lo más importante es el trabajo de la conciencia fonológica, en palabras de Dehaene (2015): “El aprendizaje de las correspondencias entre grafemas y fonemas es una etapa indispensable durante el primer año de lectura”. La conexión entre la visión de las letras y la codificación de los sonidos del lenguaje, con el paso del tiempo entraña un considerable refinamiento de la precisión del sistema visual (Dehane, 2015).

A través de la enseñanza sistemática de la conciencia fonológica se acelera el aprendizaje y se facilita la autonomía a los nuevos lectores, que serán capaces de reconocer con precisión las letras. Por eso Ludiletras ofrece diferentes estímulos de lectura, variando la tipología de letra, para ampliar y potenciar este aprendizaje.